Trigo sarraceno con calabacín y zanahoria

Si el otro día os presentaba una receta con mijo, hoy os traigo una receta de trigo sarraceno con verduras muy rico. Hay que tener en cuenta que el sarraceno tiene un sabor fuerte muy peculiar. Os animo a que le deis una oportunidad, ya que es un pseudocereal con grandes propiedades nutricionales y es muy fácil acostumbrarse a él, pero, como a todo, hay que aprender. Además, por si alguien se me ha despistado, el trigo sarraceno no tiene gluten porque no es trigo, sino alforfón.

Hace bastante que usamos el trigo sarraceno en nuestros panes, en forma de harina, por todas sus propiedades tanto nutricionales como organolépticas. Ya sabéis que la dieta sin gluten está demasiado basada en el maíz y en el arroz y en sus formas almidonadas, así que todo lo que podamos aportar de nuevo, diferente, integral y nutritivo es una gran opción.

Vamos a ver la receta, ya veréis que es muy sencilla y que admite un montón de variantes. Y ya me contáis cuando lo probéis qué os ha parecido.

Ingredientes:

• Una cebolla mediana.
• Medio calabacín grande.
• Dos zanahorias.
• Un vaso de trigo sarraceno.
• Dos vasos de caldo de verduras.
• Aceite.
• Sal.
• Pimienta.
• Nuez moscada.

Preparación:

1. Trocear y sofreír la cebolla en una sartén amplia con un poco de aceite y sal hasta que se ablande sin llegar a dorarse.
2. Agregar la zanahoria troceada muy pequeña y el calabacín y sofreír hasta que el calabacín esté hecho.
3. Incorporar el trigo sarraceno, darle un par de vueltas y agregarle sal, pimienta y nuez moscada al gusto.
4. Añadir el caldo y dejar cocer a fuego medio hasta que se consuma por completo.
5. Servir enseguida.

Recomendaciones:

• Esta receta admite cuantas variantes se nos puedan ocurrir, con pollo u otra carne, con trocitos de jamón, con otras verduras…
• Si el grano se nos queda muy al dente, tapar la sartén y dejar hacer con el calor residual.

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